Hace
justamente un año, el 27 de noviembre de 2012, envié un correo a unos tres
centenares de familiares, amigos y conocidos dando cuenta del nacimiento de mi
blog “Crónicas del Siglo Pasado” e
invitándolos a que siguieran su desarrollo con el compromiso de mi parte de
alimentarlo con nuevas crónicas todos los meses.
El
compromiso se ha cumplido. Al momento de enviar ese correo aparecían 16
crónicas que había “colgado” desde el 29 de octubre, ya que consideré que debía
haber algo de material de lectura acumulado al momento que los lectores
ingresaran por primera vez al blog. Posteriormente todos los meses me he
encargado de incrementar las crónicas.
RECUENTO
DE LO ESCRITO
Hoy
puedo decir que en este primer año, si consideramos las hoy entregadas, he
llegado a 78 crónicas en total. Bajo la sección o etiqueta “Política del 60 al 90” hay 27 crónicas, la sección “Viajero monolingüe” ha llegado a 21,
mientras que “Ricardopalmino”
alcanza 17 y “Mi familia y mi ciudad”
a 11. La sección “Siglo 21” con esta
crónica llega a sólo 2.
Desde el
inicio he tenido en cuenta los distintos intereses que pueden tener mis amigos.
Por eso en “Política del 60 al 90”
hay relatos recogidos sobre la intensa actividad política partidaria que
realice desde los 16 hasta los 49 años, momento en que dejé la política activa.
La sección “Viajero monolingüe” viene
presentando mis experiencias de viajero internacional hablando sólo español. “Ricardopalmino” trae recuerdos de mi
vida escolar y la de mis compañeros de la promoción 1958 de la Gran Unidad Escolar
Ricardo Palma, así como algunos relatos que tienen que ver con hechos sucedidos
después que dejamos el colegio. La sección “Mi
familia y mi ciudad” junto con reminiscencias familiares, presenta crónicas
sobre la Lima que conocí en mi juventud.
Además, el blog tiene la sección “Siglo 21” para crónicas que eventualmente no sean relatos del
siglo pasado, como lo es ésta que presenta una especie de balance sobre el blog
a lo largo de este año. La anterior titulada “Presentación de libro por mis 70 años” se publicó justamente el 27
de noviembre del año pasado y contiene el discurso que pronuncié un par de
meses antes cuando en el Auditorio del BBVA Banco Continental se presentó el
libro “¿PARA QUÉ SIRVE EL PODER? Vida,
política y ética a los setenta años de Alfredo Filomeno” con el que un
grupo de amigos quiso homenajearme.
Lo dicho
en esa ceremonia y en los artículos testimoniales del libro, haciendo
reiteradas referencias a mi buena memoria y el reclamo que debería compartir
mis vivencias, fueron lo que finalmente me decidieron a iniciar este blog.
LAS
CRÓNICAS EN CINCUENTA PAÍSES
Hoy el
balance no puede ser mejor. En este año hubo 17500 entradas al blog. De éstas, lógicamente
las realizadas desde el Perú son cerca del 85%, poco más de 14700. Desde los
Estados Unidos hay cerca de un 8% con alrededor de 1400 entradas. Alemania
tiene cerca de 250 entradas, mientras, Rusia, Canadá, México y España registran
entre 100 y 200 entradas. Desde Chile y Argentina ha habido más de 50 entradas.
Estos
nueve países son prácticamente constantes a lo largo de estos doce meses,
mientras que los Países Bajos, Colombia, Reino Unido, Costa Rica y Francia se
han turnado en el décimo lugar con alrededor de 30 entradas.
Hay
varios ingresos desde países europeos como Noruega, Suiza, Polonia, Croacia,
Bélgica, Portugal, Ucrania, Irlanda, Suecia, Serbia, Italia y Bielorrusia.
Mientras que también los hay desde países latinoamericanos como Venezuela,
Bolivia, Ecuador, Panamá, Brasil, Uruguay, Honduras, El Salvador, Cuba y Dominica.
De Asia se han registrado entradas desde Indonesia, Malasia, India, Filipinas,
Corea del Sur y China. También hay ingresos desde Australia. Finalmente
poquísimas veces, no más de tres, hemos tenido ocasión de constatar que nos
leen en países tan distintos y distantes como Kirguistan, Brunei, Singapur, Pakistán
y Letonia.
EL
PROBLEMA DE SER MIGRANTE DIGITAL
Pero la decisión
de iniciar el blog no fue fácil si consideramos que era comenzar una aventura
utilizando un medio para el cual los de mi generación estamos poco preparados.
En los últimos años se habla de nativos digitales, para catalogar a aquellas
personas que han nacido a partir de la década de los 80, cuando existía ya una
tecnología digital. Por otro lado se denomina inmigrante o migrante digital a
todos aquellos nacidos antes del año 1980.
Ser
nativo digital para los jóvenes y más aún para los niños de la actualidad
significa que desde que nacieron tuvieron a su alcance, en sus hogares, en sus
escuelas y/o en lugares de recreación, computadoras primero, celulares luego y
actualmente toda suerte de “tablet” que manejan con mayor destreza que sus
mayores.
Si vale
la comparación podemos decir que los nacidos en los 70 fueron migrantes que
llegaron en avión al mundo digital. Los nacidos en los 60 arribaron en aviones
a hélice, mientras que los migrantes de los 50 llegaron en barco. Los nacidos
entonces en los 40 prácticamente llegamos en barcos de vela a ese nuevo mundo.
Mantener
el blog es siempre un reto. Hay por cierto un público de conocidos a los que
comunicó todos los meses que estoy “colgando” nuevas crónicas, pero también hay
que escribir para lectores que llegan inopinadamente a leerlo y que requieren
que cada crónica pueda tener algún contexto. A lo largo de estos meses hay
crónicas que están ligadas, pero se han escrito pensando en que puedan leerse
independientemente y creo haberlo logrado.
Las
secciones -llamadas etiquetas en el blog- muchas veces están entrelazadas, siendo
el quehacer político lo que más marca las crónicas, ya que además de la sección
“Política del 60 al 90”, la
denominada “Viajero monolingüe” contiene
crónicas de viajes realizados durante mi actividad política. Pero incluso las
secciones “Ricardopalmino” y “Mi familia y mi ciudad” en algunas
ocasiones se entrecruzan en algún momento con la política.
Debo
decir que seguramente ha habido aspectos en que el blog pudo estar mejor. Son
retos para los próximos meses. Uno de ellos es la inclusión de fotografías. En
algunos momentos se puso algunas, pero la impericia para rescatarlas y tener
todo un banco de imágenes es una falla que en algún momento trataré de
subsanar. Otro asunto del cual más de un amigo, de los que tienen la mitad o el
tercio de mis años, me ha hablado es que debo poner el blog en redes sociales,
de las cuales poco entiendo. Lo he pensado muchas veces y espero entenderlo
pronto…
Al
cumplirse un año de comenzar a entregar estas crónicas, debo agradecer los
comentarios personales, telefónicos y en correos electrónicos que he recibido a
lo largo del año, así como los comentarios en el propio blog. El reconocimiento
a esta tarea de presentar a toda una generación, a través del testimonio
personal, es algo que me compromete a perseverar en este quehacer que quita
algo de tiempo al descanso pero gratifica al conocer la satisfacción de los
demás.
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